28 abril 2013

Vía verde Sevilla - Los Palacios

Hace unos días me propuse hacer en bici el recorrido Sevilla - Los Palacios por la vía verde que existe, un amigo me había hablado de ella y busqué información en Internet. La primera página de resultado es la oficial de la Junta de Andalucía, pero con una información desactualizada, ya que el recorrido propuesto ha sido modificado por las obras del complejo de Palmas Alta y aún no lo han corregido.
Inicio corredor verde Sevilla - Los Palacios- Junta Andalucía
Pero realmente si salieras del punto inicial (1), no podrías cruzar, o tendrías que hacerlo por los aparcamientos del complejo de oficinas (2), o si continuas bordeando por su perímetro exterior es incierto el camino... ¿termina? (3)
Inicio Vía verde desde Sevilla

Si superamos este enorme lío, las dificultades no acaban, porque gracias a que no seguí este camino "oficial", (puntos verdes) pude comprobar (siguiendo el camino alternativo aconsejado en en foros marcado de azul) que la vía se corta bajo un tunel impracticable anegado de agua y piedras (4), a pesar de que hacía más de tres semanas que no llovía.


Pasados los obstáculos, seguí mi camino de "baldosas azules" y pude disfrutar de un día de turismo de unos 35 kilómetros (contando desde mi casa hasta llegar a mi destino, Los Palacios).
Realmente, el recorrido está medianamente aceptable pero dudo que termine el año, más bien el verano, en las mismas condiciones  ya que aunque estamos solo a principios de primavera, la vegetación ha invadido los márgenes en muchos tramos y del metro y medio de anchura que dice tener, se reduce a veces a medio metro provocando que te roces con las malas hierbas y muchas tienen pinchos; hubiera sido mejor ir con mallas en las piernas o camiseta de manga larga para evitar algunos arañazos que me traje de recuerdo.



Así que si no te importa mucho las marcas en tus brazos y piernas, puedes disfrutar de un bonito viaje en el margen derecho del río Guadaira. Por la mañana me crucé con otros ciclistas, pero por la tarde, en mi regreso sobre las 3, 4 de la tarde, no ví un ser humano en todo el recorrido. Consejo, mejor acompañado que solo.

En un momento dado tienes que cruzar el río Guadaira, puedes seguir unos pocos metros más por una carretera que te lleva a otro camino de tierra, corredor verde, camino del parque La Corchuela.



Vuelvo a coger la tierra y vuelvo a tener dudas: una puerta y vayas me impiden el paso a lo que se supone es la continuación de mi camino, y como no estoy acostumbrado, pregunto a alguien que pasaba por allí y me señala la parte por donde pasan los ciclistas; me comenta que es un espacio protegido, por eso no pueden pasar vehículos no autorizados.


Y es cuando comienza una de las partes más bonitas de esta excursión. 
Entre un mar de flores, Alcornoques, olivos y estanques naturales encuentras incluso toros sueltos; entro en el cerro de Galindo.




Una vez que salgo de allí, por su correspondiente vereda habilitada, casi de frente nos encontramos con el Cortijo La Corchuela, pero señores, no se confundan como me pasó a mí, que a pesar de que existía un cartel diciendo que el parque estaba unos 500 metros más lejos, como yo veía entrar muchos coches, pensé que ese era el parque, y ...vuelvo a repetir el error al leer propiedad privada sin hacerle caso, me guiaba más por mi deseo que por lo que mi cabeza. y así me fue hasta que un mercedes, posiblemente del marqués que allí habita, me preguntó qué hacía yo por esas propiedades. ;-P




Y encontré el parque. Existe mucha sombra y pequeños estanques acondicionados con animales anfibios, también existen carteles que te explican la fauna y flora.








Me quisiera parar un poco en la zona de servicios, porque merece un capítulo aparte: Los Servicios son bastantes precarios; a pesar de que hay un enchufe, está muy alto para no cuelque cualquier cosa (móvil por ejemplo) sin peligro de que se caiga. A los urinarios les han robado el tubo que riega el recipiente, así que si os ocurre pulsarlo, apartaros de allí rápidamente porque os riega todo los pies. Y para rematar los lavabos está cerrada la llave de paso, si os queréis lavar las manos, tendréis que agacharos y encontrar en la pared donde está para abrirla. ¿Complicado, no?




Una vez descansado y disfrutado el paisaje del recinto, los caminos y los animalitos sueltos, me preparo mentalmente para preguntarme si merecerá la pena ir a Los Palacios, si tendré fuerzas de llegar o si merece la pena el pueblo... Sigo haciendo fotos.








Y llegamos al pueblo, no sin un poco de peligro, porque a falta de tres kilómetros se acaba el corredor verde, y tienes que continuar por la carretera por un arcén inexistente; más tengo la sensación de que los propietarios de terrenos por donde podría pasar la vía verde "se la han comido" con sus tierras de cultivo, porque no existe un razonamiento lógico. Vuelve a pasar como en Sevilla, resulta muy difícil la entrada o la salida de las grandes ciudades para las bicicletas

Me repongo de la sed, como un bocadillo y doy una vuelta.



No está mal, pero... tengo ganas de volver a Sevilla, así que no lo pienso más, y me pongo a correr con todas mis fuerzas y a máxima velocidad para volver a mi casa.

Consejo, bebed y llenad un par de cantimploras por lo menos, todo lo que podáis, la echaréis en falta.