14 julio 2013

Prepárate: el futuro del trabajo ya está aquí - Lynda Gratton

La autora, gracias a su trabajo como consultora por todo el mundo, basándose en su experiencia y lo que ha podido preguntar a muchos expertos plantea en el libro que hay cinco fuerzas que modelaran el futuro. Éstas son la tecnología, la globalización, la demografía - longevidad, la fuerza de la sociedad y la fuerza de los recursos energéticos.

En la primera parte de libro plantea dos futuros centrados en la vida ficticia de varias personas en el año 2025, un futuro "por defecto", donde nadie está preparado para colaborar con los demás y no está dispuesto a cambiar de status quo, y otro futuro "elaborado" con personas que experimentan con formas de trabajar, que aprenden unos de otros, que trabajan de una forma mas armoniosa con los demás.

Plantea que habrá tres cambios que tenemos que tener en cuenta para postular nuestra vida laboral en las dos próximas décadas; primero que los conocimientos generales serán insuficientes y tendremos que buscar áreas en las que especializarnos y a la vez ser más visibles; segundo que la idea del individualismo y la competitividad también tiene que ser cuestionada pues lleva al mundo a más fragmentación y aislamiento. En cambio la conectividad, la colaboración y las redes será fudamentales. Y por último replantear la forma de vivir que tenemos actualmente basada en el consumismo y la cantidad hacia valorar más la calidad de nuestras experiencias.

Dentro de los males que anuncia para el futuro es la fragmentación de nuestra vida provocando la incapacidad de enfoque, concentrarse y ser creativos. Las soluciones que propone son volver a la encontrar trabajos basados en la maestría, es decir, una carrera laboral basada en la dedicación y la concentración, recordemos que se necesitan 10.000 horas para aprender algo en profundidad. Se necesita fuerza de voluntad para resistir la tentación de la fragmentación y dedicar suficiente tiempo a la formación, al aprendizaje y a la práctica. El segundo consejo que nos da que además de centrarnos en nuestros objetivos personales podamos construir relaciones significativas con otras personas. Y el tercer cambio que necesitamos es pasar de ser consumidor voraz a productor apasionado.

El primer cambio que propone es pasar de ser "generalista superficial" a "master disciplinario". El éxito de nuestro trabajo futuro dependerá en parte de la habilidad para construir un capital intelectual que nos permita generar valor; para ello tendremos que conocer que habilidades y competencias están en demanda y cómo adquirirlas no olvidando que tenemos que elegir también lo que más nos guste. Pensar como un artesano; jugar como un niño; forjar y cultivar nuestras credenciales; construir una cuadrilla, una comunidad de grandes ideas.

La última parte del libro habla de "elecciones, consecuencias y compromisos". Nos aconseja que dentro podemos elegir renunciar a un sueldo a cambio de un año sabático o elegir convertirse en microemprendedor con todos los riesgos que supone. Elegir un trabajo con horario flexible o trabajo compartido para pasar tiempo con la familia o amigos. Nos advierte que nos surgirán sentimientos de ansiedad pero son estas emociones las que da significado, carácter y textura a nuestras vidas laborales.

Diseñar nuestro futuro basado en aquello que valoramos. Explica que el cambio no vendrá si esperamos que las instituciones lo hagan, tampoco que sea a través de un proceso individual sino que, dice la autora, será cuando la gente comparta estos temas con los demás y esté conectada en movimientos cada vez más globales. Y hace dos predicciones: que el futuro se producirá más dentro del marco de nuestras aspiraciones, necesidades y capacidades individuales, y que nuestro trabajo futuro pasaremos de un modelo tradicional centrado en el sueldo y el consumo hacia un modelo centrado en las experiencias productivas.

Añade que para desarrollar nuestra capacidad de diseñar nuestro futuro será necesario que reconozcamos nuestros sentimientos y debilidades, que seamos capaces de correr riesgos que nos sean incómodos y ser valientes a la hora de actuar. ¿Como podremos manejar la ansiedad que sentiremos al diseñar nuestro futuro? Pues dependerá de la calidad de nuestros encuentros, de nuestras comunidades regenerativas, de los amigos cercanos y positivos en quienes confiamos y pasamos el tiempo con compasión y paciencia.

Afirma: "Para cada uno de nosotros el reto consiste en llevar una vida laboral más encaminada a tener una mejor comprensión de quiénes somos y lo que valoramos, de nuestras elecciones y de sus posibles consecuencias. Para ello tendremos que tener el valor de decir que no; de buscar activamente las condiciones para tener un trabajo que tenga sentido y que valoremos. Esto hará que en un momento dado tengamos una perspectiva de nosotros mismo como "menos normales" y más como individuos comprometidos con el estilo de vida que deseamos y la persona que queremos ser."